El renacer de un sentimiento

Mucho tiempo ha pasado ya desde aquel 15 de noviembre de 1997 en el que metiera mi primer gol en partido oficial con la camiseta del CD Tokiski. Ayer, al poner el empate a uno en las tablas, 13 años y 2 meses después, volví a sentirme como aquel chiquillo de catorce años que empezaba a jugar a un deporte que se estaba poniendo de moda, el fútbol sala. No lo celebré de milagro, pero por dentro, creedme que sí lo hice.

Tras estos años he vivido muchas alegrías al frente de este equipo y también algunos que otros sinsabores, pero siempre he tenido ilusión por hacer un Tokiski grande. A veces lo he hecho muy bien al mando de esta nave, otras muchas también me he equivocado. Reconozco que últimamente, debido a los compromisos personales y al palo de la falta de continuidad del primer equipo, no he estado tan metido en el club, pero los pocos minutos que pude disputar ayer me hicieron renacer mi sentimiento tokiskero.

Ya, desgraciadamente, no estoy más que para gestionar el club, apoyar o jugar algunos ratitos, pero desde aquí animo a todos aquellos que algún día vistieron la camiseta del equipo de San Pablo a que se impliquen con el club. De la manera que puedan, jugando, entrenando o simplemente acudiendo a algún partido a apoyar a los chicos que forman los escalafones inferiores.

Sé que muchos lleváis al CD Tokiski en vuestros corazones, así que qué mejor forma que volver a ponerse la camiseta y defender nuestro escudo. Tú que aún puedes, te esperamos para volver a hacer al CD Tokiski el equipo más grande de San Pablo y porqué no, de Sevilla. ¡VAMOS TOKISKI!