Impresionante España. La Selección se impuso a Portugal en los penaltis en un partido agónico, en el que los de José Venancio López perdían por 0-2 a falta de cinco minutos para la conclusión del encuentro. Con Kike como portero-jugador y sendas dianas de Andreu y Daniel, el combinado nacional forzó la tanda de penaltis, en la que los internacionales no erraron un solo disparo y certificaron su pase a la gran final del Europeo, en la que este domingo se medirán a Italia.La primera mitad tuvo un ritmo intensísimo. Ambas escuadras presionaban muy arriba la salida del balón del rival, y disfrutaron de numerosas ocasiones para marcar. El primer aviso español llegó en el primer minuto de juego, en un disparo lejano y potente de Kike ante el que Joao Benedito realizó una gran intervención, desviando el esférico a córner.
La Selección buscaba robar el balón prácticamente en la cancha del cuadro luso, que tuvo en Arnaldo a su hombre más peligroso cuando fue capaz de superar el entramado defensivo de los hombres de José Venancio López. El ex jugador del MRA Navarra puso a prueba los reflejos de Luis Amado en dos ocasiones, pero el guardameta madrileño estuvo muy acertado.
España llegaba con claridad a los tres cuartos de cancha, pero sus lanzamientos se perdían lejos de los dominios de Joao Benedito. Mientras, Portugal vivió sus mejores minutos en el tramo final del primer acto. Un tiro de Gonçalo, prácticamente sin ángulo, acabó en el palo derecho de la meta española. Poco después, Joel se marcó una gran jugada personal y su chut, muy preciso, se estrelló en larguero.
El combinado nacional sufrió para evitar el gol luso y a punto estuvo de inaugurar el marcador antes de que se alcanzara el descanso, pero Ortiz, dentro del área, no pudo precisar su lanzamiento tras recibir un pase de Álvaro en un saque de esquina, y el esférico se marchó por encima de la portería de Benedito.
En la reanudación, el dominio de la Selección Española fue mucho más evidente. Las oportunidades más claras corrieron a cargo de los pupilos de José Venancio López, que, sin embargo, fueron incapaces de perforar las redes lusas, en gran medida por la excepcional actuación de Joao Benedito. Las mejores ocasiones del equipo español fueron un disparo de Eseverri a ocho metros del marco portugués que se marchó desviado por escasos centímetros, en una contra montada por Daniel; y un tremendo chut del cierre navarro que Benedito despejó con muchas dificultades.
España estaba volcada sobre la meta lusa. Y en un ataque de la Selección, llegó el mazazo portugués. Un tiro peligrosísimo de Marcelo al saque de una falta fue contrarrestado por los de Duarte con un contraataque letal, finalizado a la perfección por Gonçalo, que picó el balón ante la salida de Luis Amado.
El 0-1 fue un jarro de agua fría para los internacionales, que habían merecido mejor suerte en la segunda parte. España estuvo `groggy´ algunos minutos y entró en la táctica de un juego embarullado que sólo beneficiaba a Portugal. Y cuando la Selección trataba de reponerse del golpe, llegó otro `palo´ del conjunto anfitrión. Ricardinho creyó que la mejor solución para un pase elevado de Pedro Costa era una chilena, y el remate acrobático, ejecutado en la esquina derecha del área según el ataque portugués, le salió perfecto a la estrella lusa. Luis Amado no pudo hacer nada para evitar el tanto.
Todas las alarmas se encendieron en el banquillo español. José Venancio López apostó por Kike con portero-jugador y la táctica resultó más que fructífera. España fue muy superior a Portugal en el juego de cinco para cuarto. Las ocasiones eran continuas. El gol estaba a punto de llegar. Y llegó. Daniel volvió a ser el más listo de la clase cuando la situación pintaba oscura, y de tiro cruzado desde lejos, puso el balón justo donde Joao Benenito no podía alcanzar.
Restaban cuatro minutos para el final. Un mundo. Tanto tiempo como para ganar el partido. Y la Selección no perdió los nervios, siguió fabricando oportunidades en un gran número, y tuvo el premio del gol dos minutos después. Andreu, de volea y tras un rechace de un lanzamiento suyo, estableció la igualada. 2-2. El delirio en las gradas para los seguidores españoles. Los portugueses no se lo creían. El campeón del Mundo y de Europa había dado una nueva lección sobre la pista. La enésima.
Pero aún quedaba lo más difícil. Tras cumplirse el tiempo reglamentario, no quedaba más remedio que encomendarse a la lotería de los penaltis. Y ahí, España, como en el resto del encuentro, estuvo inmensa. Los jugadores de la `roja´ no fallaron ni uno de sus cuatro lanzamientos. Mientras, Joel se topó con un inconmensurable Luis Amado en el segundo intento luso, y Leitao mandó el tiro decisivo al palo. La Selección, en la final. Con sufrimiento, pero con oficio, experiencia y sangre fría. Con un mérito tremendo.
La plantilla y cuerpo técnico de la Selección celebró por todo lo alto su victoria. Lo mismo ocurrió en el palco, repleto de personalidades del fútbol sala nacional. Al encuentro asistieron el presidente de la Liga Nacional de Fútbol Sala, Carlos Gascón; el presidente del Comité Nacional de Fútbol Sala de la RFEF, Alberto Vilar; Julio Cabello y Gonzalo Azcárate, vicepresidentes del Comité Nacional de la RFEF; y el cónsul de España en Oporto, Javier Pérez Grifo.
La Selección disputará así la quinta final de su historia en un campeonato de Europa de naciones. España se medirá este domingo a Italia (18:00, hora española, Multiusos Gondomar, retransmitido en directo por Eurosport y Tele5 Sport), en busca de su cuarto cetro continental y el segundo de manera consecutiva.
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